Insectos a la venta en los supermercados. No de momento en España, pero está por ver qué ocurre en un futuro cercano. La última en lanzarse a esta aventura ha sido la cadena de supermercados Coop, que ha anunciado su idea de vender en Suiza productos como hamburguesas o albóndigas que contengan insectos como grillos o gusanos de la harina a partir del próximo mes de mayo. No es pionera en Europa, pues empresas de Belgica o Países Bajos, por poner dos ejemplos, ya lo llevan haciendo desde hace un tiempo.

El anuncio de Coop llega después de que la Oficina Federal de Seguridad Alimentaria de Suiza diera el visto bueno a la comercialización de determinados insectos a partir de la próxima primavera. La cadena de supermercados explica que los insectos son "una fuente de proteínas, vitaminas y minerales" y destacan por su buen sabor: "el sabor de los saltamontes recuerda al pollo y los gusanos de la harina tienen un sabor similar a las nueces". También subraya que la cría de insectos puede llevarse a cabo de manera perfectamente sostenible: "Se requiere muy poca agua y alimentos. Además, se produce sólo una pequeña cantidad de gases de efecto invernadero".

La cadena de distribución ha anunciado que ya está trabajando con la empresa suiza Essento, especializada en el desarrollo de platos a base de insectos, para crear una gama de productos con insectos que serán "sorprendentes".

"El secreto de nuestro éxito radica en nuestra capacidad para identificar tendencias e innovar", dice Roland Frefel, jefe de productos frescos en Coop. Y añade: "Mediante la adición de algunas variedades de insectos en la lista de ingredientes de determinados productos, crearemos una industria alimentaria moderna y podremos crear una oferta adecuada que permita a los clientes descubrir un nuevo mundo de sabores".

Según afirma Coop, 2.000 millones de personas en todo el mundo se alimentan regularmente en los insectos.

En España, de momento, existe un vacío legal para llevar estos alimentos a los supermercados e, incluso, esa ausencia de legislación ha hecho que fracasaran algunas iniciativas para introducir los insectos en nuestras dietas.

En octubre del año pasado, el Parlamento Europeo aprobó la autorización centralizada a escala europea de "nuevos alimentos" como insectos, hongos o productos elaborados con nuevas técnicas para agilizar su proceso de entrada en el mercado. En virtud de esta normativa, los procedimientos de autorización de nuevos alimentos se centralizan a nivel europeo a través de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA), que será la encargada de evaluar la entrada o no de estos alimentos.