Las ventas online de los supermercados vivieron un boom a causa de la pandemia. Casi tres años después de ese momento, la situación es distinta y la normalidad ha hecho que ese boom se desinfle, si bien es una tendencia a vigilar. Juana Roig, CEO de Mercadona Online, mantiene que en el caso de su compañía es algo que irá a más.
La hija del presidente y máximo accionista de Mercadona afirma que la cuota de las ventas online sobre el total representan el 1%, pero la aspiración es que el porcentaje escale hasta el 5%. "Cuando tienes a Mercadona detrás es muy fácil vender. 325 millones es mucho dinero, pero si miras las cifras somos el 1% de las ventas del grupo", comenta Roig en un podcast de Itnig.
En este momento, el servicio online atiende alrededor de 8.000 pedidos diarios, lo que muestra los grandes pasos que ha dado Mercadona desde que Juan Roig dijo que la web era "una mierda". "Era reconvertirse o morir", incide Juana Roig. Según ella, la clave ha consistido en la apuesta logística, las llamadas colmenas que sirven los pedidos online y que se encuentran en Barcelona, Valencia, Madrid, Alicante y Sevilla.
Las reflexiones en torno al ecommerce de los supermercados se centran en la rentabilidad. "Se pierde dinero", confirma Roig. No obstante, la directiva señala que es mejor que el cliente elija Mercadona y no otros supermercados. Una vez ahí, la cadena se debate entre dos modelos: colmenas en las grandes ciudades con mucha demanda y gestión de la venta online desde las tiendas en ciudades pequeñas.
"Lo más relevante que he hecho en mi carrera para estar donde estoy es ser hija de mis padres"
Este último modelo se puede asemejar a la "televenta", que tiene pérdidas. Mientras, en el modelo de las colmenas sí hay rentabilidad, alrededor de 6 euros por pedido, indica Roig. Hay que tener en cuenta que, a diferencia de las opciones de los supermercados online, Mercadona no envía los pedidos en el mismo día, de modo que busca una compra más grande y planificada, más rentable. "Tenemos un pedido mínimo de 50 euros porque ahí sí que cubrimos costes de mano de obra", señala.
Margen, beneficios y sucesión
Al hilo de las críticas de las últimas semanas por los beneficios de la distribución, Roig lanza varias reflexiones. La primera, que la facturación es elevada, pero que el margen es pequeño. Así, adelanta que el beneficio de Mercadona estará en torno a los 700 millones de euros, algo menos de un 3% más que los 680 millones de 2021.
Si la facturación ronda los 30.000 millones, eso deja un margen de beneficio de apenas el 2,3%, si bien este dato habrá de confirmarse cuando la compañía presente sus resultados.
Con respecto a la posible llegada de Juana Roig a la presidencia ejecutiva, considera que lo que más sentido tendría es la gestión por parte de un directivo, no de alguien de la familia. "Veríamos a la persona que en ese momento esté más preparada", considera. Roig reconoce que está donde está por su padre: "Lo más relevante que he hecho en mi carrera para estar donde estoy es ser hija de mis padres".
En cuanto a la situación de la compañía, Roig descarta que pueda acabar en otras manos. "Ni se vende ni saldría a bolsa, al menos mientras siga el accionista actual", subraya.
