La cooperativa valenciana Consum ha decidido cerrar temporalmente sus supermercados en las comarcas de la Safor y la Ribera, en la provincia de Valencia, tras activarse este lunes la alerta roja por lluvias torrenciales en el litoral sur.

La medida, que demuestra una vez más el compromiso de la cadena con su plantilla, afecta a 30 tiendas y a unos 1.050 trabajadores, según ha confirmado la empresa, que también ha suspendido el servicio de compra por internet en las zonas donde se ha decretado el aviso máximo por parte de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).

La decisión, que se mantendrá al menos durante la tarde de este lunes, responde —según fuentes de la cooperativa— a criterios de "prudencia y seguridad" tanto para los empleados como para los clientes, y estará sujeta a la evolución de la situación meteorológica.

La alerta roja, el nivel más alto del sistema de avisos, implica un riesgo extremo de lluvias torrenciales que podrían superar los 200 litros por metro cuadrado en 12 horas, especialmente en municipios del sur de Valencia y norte de Alicante.

Consum ha asegurado que retomará la actividad normal en cuanto las condiciones lo permitan, y que ya se ha activado un protocolo interno para evaluar el estado de las instalaciones y garantizar la seguridad antes de reabrir los establecimientos.

La cooperativa, con más de 500 supermercados en la Comunitat Valenciana, mantiene un plan de actuación específico ante emergencias meteorológicas, que contempla cierres preventivos, suspensión de servicios y comunicación directa con los empleados en las zonas afectadas.