El crowdshipping o entregas colaborativas son un concepto que lleva años triunfando en Francia. Llegó a España el pasado febrero, como os informamos, de la mano de la startup gala Shopopop, una plataforma que está disponible en 15.000 ciudades francesas y que trabaja con más de 5.000 comercios, entre ellos, los principales actores de la industria alimentaria. Actualmente, mantiene una comunidad de 300.000 shoppers y para finales de 2025 tiene previsto desarrollar una red de 50.000 tiendas asociadas.

Según explica esta compañía, el éxito de este concepto radica en los beneficios que aporta su modelo para supermercados y pequeños comercios, ya que mediante su comunidad de shoppers se aprovecha el trayecto diario de un ciudadano para entregar un paquete a otro que está en su mismo camino, normalmente un vecino.

"En este sentido, el sistema de entregas colaborativas ayuda a las grandes superficies a mejorar su sistema de delivery y hacerlo más eficiente, dando respuesta a la creciente demanda de inmediatez en estos servicios", aseguran sus responsables.

Por otro lado, al carecer de coste estructural o tecnológico, la plataforma permite a los mayoristas y minoristas reducir costes, ya que la integración de flotas de delivery suele ser un proceso costoso y en ocasiones inasumible.

"Gracias a nuestro expertise en la industria de distribución alimentaria en Francia, donde trabajamos con Auchan, Carrefour, Casino, E.Leclerc, Intermarché, Système U, etc., estamos listos para trabajar de la mano con los supermercados españoles y conseguir ser parte esencial en su crecimiento", apunta Clara Lloveres, Country Manager de Shopopop.

Por otro lado, el crowdshipping es un aliciente para aquellos ciudadanos que, cada vez más, valoran positivamente que los comercios cuenten con servicios sostenibles y colaborativos.