Jamón ibérico: por qué es un emblema de la dieta mediterránea
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El jamón es uno de los productos estrella de la dieta mediterránea y uno de los emblemas de España. Por esta razón, en Olalla Jamones se preocupan por ofrecer siempre productos de la máxima calidad, cuidando todos los detalles de su elaboración.
Uno de los aspectos que consideran importantes en Olalla es apostar por el cerdo de raza ibérica. Este cerdo, que tiene un tamaño medio y un color oscuro, es el que tradicionalmente se viene criando desde la antigüedad en las dehesas ibéricas. En particular, los jamones de Olalla provienen de cerdos criados en dehesas de Andalucía y Extremadura.
En Olalla vas a encontrar una marca de referencia en cuanto a jamones ibéricos se refiere. Ofrecen tanto jamones como paletas ibéricas (de bellota y de cebo de campo). Además, su bodega es una de las inscritas en el Consejo Regulador de la D. O. P. de Jabugo, por lo que también tienes a tu disposición el conocido jamón de pata negra criado en las dehesas de la provincia de Huelva.
Beneficios y propiedades del jamón ibérico
En primer lugar, es necesario hacer una distinción entre el jamón ibérico y el serrano. El primero se obtiene de los cerdos de raza ibérica, mientras que el segundo procede del cerdo blanco (que se suele criar de forma intensiva en explotaciones estabuladas). Por este motivo, la forma de cría del cerdo ibérico, que pasa largas temporadas en las dehesas pastando, y su alimentación (ya sea exclusiva de bellotas y hierbas o complementada con piensos de cereales -cebo de campo-) hacen posible obtener un alimento saludable y rico en propiedades nutricionales.
Valor nutricional
Las grasas que encontramos en el jamón ibérico son principalmente insaturadas (consideradas como las grasas «buenas») y tienen un elevado contenido en ácido oleico (debido a su alimentación con bellotas de encinas y alcornoques principalmente). De esta forma, ayudamos a reducir el colesterol «malo» o LDL (uno de los factores de riesgo para desarrollar enfermedades cardiovasculares).
Asimismo, es una importante fuente de proteínas (unos 30 g por cada 100 g de producto) con un alto valor biológico. De esta manera, obtendremos los aminoácidos esenciales que nuestro organismo necesita (y que no puede fabricar por sí solo) para llevar una vida saludable. Hay que tener en cuenta que la OMS recomienda consumir entre 0,8 y 1 g de proteína por cada kilogramo de peso de una persona adulta sana.
Vamos a encontrar también altas cantidades de minerales como el calcio, el fósforo, el hierro, el magnesio, el zinc..., y vitaminas del grupo E y B (especialmente la B1 y la B12).
Con toda esta información, no es de extrañar que el jamón ibérico sea uno de los símbolos de la dieta mediterránea y de España. Y podemos entender, además, por qué este tipo de dieta es una de las más saludables del panorama internacional. Por todo esto, en Olalla quieren seguir contribuyendo a potenciar este producto nacional y darle el valor que merece. No dudes en visitar su página web y descubrir toda la gama de productos en torno al jamón ibérico que tienes a tu disposición.
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