El 1 de julio de 2024 entró en vigor la ley francesa contra la reduflación, que obliga a los distribuidores a informar a sus clientes acerca de la estrategia, seguida por algunas enseñas y fabricantes, que consiste en ocultar subidas de precios mediante la reducción en la cantidad de producto.
Entre las muchas maneras que los fabricantes han encontrado para sortear esta ley y llevar a cabo sus subidas de precio, se encuentra la de mejorar la receta de producto o 'nutriflación', como explicamos el pasado mes de julio.
Ahora, el periodista francés Olivier Dauvers ha localizado una segunda vía: la 'aumenflación', que consiste en aumentar el tamaño del envase en kilos/litros con la finalidad de incrementar el precio de manera más que proporcional y, de esta forma, sortear la legislación.
Así, el fabricante Belin, especialista en galletas y aperitivos, ha incrementado el 10% su gramaje para incrementar los precios hasta el 30%. "En pocas palabras, se trata de una explosión en el precio/kilo", subraya Dauvers.
Además, sus nuevos formatos contienen un letrero en el que se lee: "Ahora más crackers (galletas saladas) en un nuevo formato", que tiene como finalidad desviar la atención del cliente tanto del gramaje como del nuevo precio.