El grupo Ebro Foods ha cerrado el primer trimestre del año con una facturación de 791,9 millones de euros, el 1,8% menos que el pasado año.
El beneficio neto también retrocede hasta los 50,3 millones de euros, el 6,4% menos que en el mismo periodo del ejercicio anterior, pese a registrar un nuevo máximo en su beneficio operativo ajustado (ebitda-A), que se elevó un 2,2%, hasta los 112,1 millones.
Los datos, comunicados este martes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), reflejan una evolución negativa del negocio en un entorno de agotamiento de los consumidores y avance de la marca blanca. En un comunicado, la compañía ha calificado los resultados como "sólidos" y ha subrayado que el ebitda-A "supera el ya histórico récord registrado en el primer trimestre de 2024", apuntando al "éxito de la estrategia centrada en productos de valor añadido" y en la "presencia industrial en mercados clave".
Apuesta por el valor añadido
El primer grupo de alimentación por facturación en España ha destacado el impulso de productos como los arroces listos para calentar, variedades aromáticas y soluciones para microondas, que "comienzan a dar sus frutos" y están permitiendo "un buen crecimiento y mejora de la rentabilidad", a pesar de la caída en la facturación global.
La división de arroz —núcleo del negocio del grupo— alcanzó unas ventas de 611,4 millones de euros y un ebitda-A de 87,3 millones. Las marcas del grupo, entre las que se encuentran Brillante, SOS o La Fallera, mantuvieron un "comportamiento positivo" y siguieron ganando confianza en los distintos mercados.
El grupo ha aprovechado además una coyuntura favorable en las materias primas: las abundantes lluvias en el sur de España permitirán sembrar el 100% de la superficie prevista en Andalucía y Extremadura, y la reapertura de las exportaciones de arroz por parte de India, unida a las buenas cosechas en el Cono Sur, ha presionado los precios internacionales a la baja. Esto, según la compañía, "alivia la presión sobre los costes de aprovisionamiento", un factor clave tras varios años de tensión inflacionaria.
Pasta al alza y expansión internacional
La división de pasta, también muy presionada por el avance de la marca blanca, ha cerrado el periodo con una facturación de 181,2 millones de euros y un ebitda-A de 29,5 millones. Ebro Foods ha destacado el buen comportamiento de las gamas premium y frescas, especialmente en Francia y Canadá. En el mercado francés, su marca Lustucru ha consolidado su liderazgo con nuevos lanzamientos y la ampliación de capacidad en la planta de Lyon.
En Canadá, Olivieri ha mantenido su solidez a pesar del encarecimiento de ingredientes como el huevo, afectado por la gripe aviar. A nivel global, la marca italiana Garofalo creció un 11,5% gracias a su "estrategia de diferenciación", basada en una nueva línea rica en proteínas.
Inversiones estratégicas
Ebro Foods ha situado su deuda neta en 599,3 millones de euros tras destinar 29,9 millones a inversiones en activos a largo plazo (capex) y aumentar su circulante para garantizar el aprovisionamiento de materias primas clave. En paralelo, ha acelerado las importaciones de arroz aromático y productos para microondas desde Asia ante el "actual contexto de incertidumbre arancelaria en Estados Unidos", y ha avanzado en sus planes para ampliar capacidad productiva en ese país.
La compañía afronta 2025 con una hoja de ruta enfocada en los productos con mayor margen y los mercados internacionales.