Desde hace tiempo os venimos contando cómo las marcas blancas han dejado de ser lo que eran hace varias décadas para convertirse en productos muy deseados por el consumidor. Casos como el boom de Hacendado o las famosas cremas Cien de Lidl son algunos exponentes de este boom. Pero más allá de grandes éxitos más o menos puntuales, lo cierto es que la marca de distribuidor no deja de arañar cuota de mercado a la marca de fabricante. Y este año 2020 se ha producido un fuerte despunte como consecuencia de la pandemia y la posterior crisis económica derivada del coronavirus.

Un estudio de Gelt, la app especialista en compra inteligente en el sector de gran consumo, revela interesantes datos sobre la evolución de la marca blanca desde el mes de enero.

Durante este periodo, las marcas blancas han pasado de representar el 37% de las compras al 47%, lo que supone un aumento de diez puntos porcentuales de cuota de mercado. El análisis destaca que la presencia de marcas de distribución en la lista de la compra empezó a subir en el mes de abril, justo tras el confinamiento, en el que pasó a tener una cuota del 41,4%. Entre agosto y septiembre se marcó el pico de aumento, con el 46 y 47% respectivamente.

Por categorías de productos, Gelt destaca que estos son los que tienen una mayor penetración de marcas blancas en este momento:

• Limpiadores: 58%
• Legumbres: 47,7%
• Cereales para el desayuno: 47,7%
• Leche: 35,9%
• Detergentes: 30,5%
• Café: 30,2%.

Penetración entre los consumidores

Según Gelt, un análisis detallado de la selección que realizan los clientes en su cesta de la compra denota que 8 de cada 10 eligen, al menos, una marca blanca de alimentación en su lista. Se trata del mismo porcentaje que opta también por una marca genérica de limpieza cuando realiza la compra.

Las bebidas no alcohólicas son otra de las categorías en donde mayor penetración de estas marcas hay: 6 de cada 10 consumidores las escogen. Con respecto a la implantación en otras categorías, destacan el 59% en productos de higiene personal, el 36% en bebidas alcohólicas y el 31% en cosmética y belleza.

En cuanto a los factores que llevan a la compra de marcas blancas, el análisis señala que el 77% de los ciudadanos afirma que consume más marcas de este tipo en épocas de crisis, pero además que ese mismo porcentaje (77%), afirma que la principal razón para elegir estas marcas es su relación calidad/precio; para el 38% la razón es únicamente que son más baratas que las marcas líderes; un 27% señala la variedad que permite esta oferta y el 26% se decanta por ellas cuando no encuentra su marca preferida en oferta.

Carlos Prieto, CEO y cofundador de Gelt, explica sobre estos resultados que “estamos inmersos en un momento delicado para nuestra economía que nos lleva a una compra cada vez más inteligente como consumidores. Es una coyuntura que favorece las ofertas, las promociones y, por supuesto, a las marcas blancas que cada vez tienen mayor implantación en el mercado. Este estudio demuestra cómo el precio se posiciona como la variable fundamental en la elaboración de la lista de la compra y un dato muy esclarecedor para reflexionar es que más de una cuarta parte de los clientes se decanta por una marca blanca cuando no encuentra ofertas en sus marcas favoritas. Está claro que todo esto influirá de modo definitivo en la política de precios de las marcas durante este otoño”.