Los márgenes empresariales se situaron en el primer trimestre de 2023 en niveles similares a los registrados antes del estallido de la pandemia, con una excepción notable: la cadena alimentaria, que además ha sido uno de los sectores más afectados por la reciente inflación de costes iniciada en 2021.

Esto es lo que se desprende del nuevo Observatorio de Márgenes Empresariales lanzado conjuntamente por el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, el Banco de España y la Agencia Tributaria.

La hostelería y la alimentación, que sufrieron caídas de márgenes cercanas al 75% en 2020, ya se encuentran cerca de las cifras registradas antes de la Covid-19.

Los márgenes de la cadena alimentaria, que sufrieron una caída del 25% desde el inicio de la guerra de Ucrania y hasta entrado 2022, debido fundamentalmente al encarecimiento de las materias primas, aún permanecen en niveles inferiores a su media histórica, pese a que ya evidencian una ligera recuperación en los últimos meses (ver gráfico arriba).

En el primer trimestre de 2023, el descenso de los costes ha repercutido en una mejora de los márgenes de la cadena alimentaria, que han repuntado cerca de un punto porcentual.

En los eslabones finales de la cadena alimentaria, tanto el margen del comercio minorista como el del comercio mayorista se encuentran a comienzos de 2023 en niveles similares a su media histórica. Tras registrar un mínimo en el cuarto trimestre de 2022, ambos márgenes han repuntado en el primer trimestre del año, incremento que ha sido más acusado en el caso de los márgenes del comercio mayorista, que históricamente han sido algo mayores que los del comercio minorista (ver gráfico arriba).

Los datos frente al relato político

Desde determinadas instancias políticas se alimentó durante meses el relato de que la cadena alimentaria se estaban beneficiando de la coyuntura inflacionaria.

La ministra de Derechos Sociales Ione Belarra llegó a acusar a la distribución alimentaria de "oligopolio" y acusó a Juan Roig, CEO de Mercadona, de ser un "capo". Nadia Calviño se pronunció en términos más suaves pero en una dirección similar.

Ahora, el Observatorio, nacido con el objetivo de mejorar la disponibilidad de información sobre márgenes empresariales, pone punto y final a un largo debate iniciado por razones electorales.