La expansión de Mercadona en Portugal continúa avanzando de forma estratégica, con la reciente firma de un contrato para la apertura de una nueva tienda en HOP -Heart of Porto-, un proyecto inmobiliario de uso mixto situado en pleno centro urbano de Oporto.

Con este movimiento no solo refuerza la presencia de la cadena de Juan Roig en Portugal, sino también su alineación con tendencias clave en el retail alimentario: integración urbana, conveniencia y proximidad.

Heart of Porto es el resultado de la reconversión del antiguo centro comercial La Vie, trasformado ahora en un complejo multifuncional con oficinas, espacios comerciales y zonas de ocio. Con cerca de 30.000 metros cuadrados, el proyecto incorpora 15.500 metros cuadrados de oficinas de nueva generación, más de 8.200 metros cuadrados destinados a retail en dos niveles y 416 plazas de aparcamiento, incluyendo infraestructura para movilidad eléctrica y sostenible (42 puntos de recarga y 90 plazas para bicicletas). Este planteamiento responde a un patrón mixto en los centros urbanos europeos destinado a trabajadores, residentes y visitantes.

Desde la perspectiva de Mercadona, la apertura en HOP representa un paso coherente con su estrategia en el país. La compañía ha apostado por Portugal a través de un modelo que combina inversión propia, proximidad operativa y aprendizaje del consumidor luso en categorías clave como frescos, MDD y surtido corto eficiente.

La elección de un emplazamiento céntrico confirma el giro estructural del sector hacia formatos integrados en la vida cotidiana del consumidor urbano. Para el retail alimentario, la conveniencia se redefine no solamente como cercanía geográfica sino como capacidad para integrarse en la rutina habitual del cliente.

Para el proyecto HOP, la incorporación de Mercadona aporta anclaje comercial y sirve como flujo para el conjunto del edificio, posicionándolo como punto habitual de consumo diario. La presencia de un operador líder consolidará la recurrencia de usuarios y contribuirá a dinamizar el entorno comercial del centro de Oporto.

Esta apertura representa a la perfección cómo las cadenas de distribución están redefiniendo su relación con el tejido urbano. Mercadona sigue ajustando su modelo a las características de la demanda portuguesa, al tiempo que se integra en proyectos inmobiliarios que buscan reactivar áreas urbanas. El movimiento confirma el crecimiento en proyectos mixtos en entornos metropolitanos para optimizar la cadena de suministro alimentaria, haciéndola más eficiente, sostenible y centrada en la proximidad al consumidor.