La cadena catalana Sorli sigue avanzando en su transformación digital y ejemplo de ello es la nueva web que luce desde hace varios meses. Sin embargo, la compañía se está tomando con tranquilidad los cambios y aún no navega en la ola del comercio electrónico. Además, parece que le cuesta olvidarse de su apellido Discau, que aún está presente en sus perfiles de redes sociales.

Ya han pasado casi dos años desde que Sorli anunciara un ambicioso plan para reinventarse por completo. De Sorli Discau pasaba a ser simplemente Sorli y aventuraba un nuevo modelo comercial que está dando buenos resultados.

Sorli ya ha adaptado a este nuevo modelo un total de 17 tiendas y en este 2018 se prevé la adaptación de 13 establecimientos más, unos ajustes que van acompañados del citado cambio de enseña. En total, la cadena cuenta con más de 100 supermercados.

Esos cambios en el mundo offline han venido acompañados de un lavado de cara en su lado más online, protagonizado por una nueva web que vio la luz tras el pasado verano. El nuevo portal, más visual y manejable, cuenta con información sobre la compañía, detalles sobre sus promociones, buscador de tiendas, zona de clientes, sala de prensa, portal de empleo y un blog con curiosidades y recetas gastronómicas. La web, sin duda, está muy adaptada a los nuevos tiempos.

Sin embargo, el ecommerce aún no entra en los planes inmediatos de Sorli. Ya lo anunció a FoodRetail el director general de Sorli, Josep Figueras, en octubre de 2016: "Sabemos que es un mercado que está creciendo, pero poco. Se oye mucho, pero en la alimentación el volumen es muy pequeño y económicamente hay que hacerlo rentable. Es un servicio costoso. Tenemos que ver cómo afrontarlo". En todo caso, anunciaba que Sorli quería poner "su granito de arena" al comercio electrónico en alimentación.

El cambio de web, además, no ha venido acompañado de una renovación de sus redes sociales. Así, en sus perfiles de Facebook, Twitter, Instagram y YouTube, la compañía sigue mostrándose como Sorli Discau.

A falta de conocer los datos de 2017, la compañía cerró 2016 con una facturación de unos 240 millones de euros, de los cuales unos 215 millones proceden de su red de supermercados. El resto llega de sus gasolineras y de otras actividades del grupo. La facturación en su sección de retail fue similar a la lograda en 2015. En total, la empresa cuenta con unos 1.800 empleados.