RSC | El gran consumo y la restauración luchan por reducir la huella hídrica

Desde el Foro de la Economía del agua apelan a la unión de todos los actores, públicos y privados, para profundizar en el ODS 17.

Las alianzas estratégicas son fundamentales para garantizar el derecho humano al agua, tanto desde la perspectiva del acceso al agua potable como para su uso en la alimentación en niveles suficientes de calidad.

Esta es una de las conclusiones del encuentro 'Safe Food and Water por all', celebrado en Barcelona durante el evento internacional BforPlanet sobre los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

Estanislao Arana, director académico del Foro de la Economía del Agua, apuesta por la implicación en este reto de todos los actores sociales, públicos y privados, para el buen aprovechamiento del recurso. “Sin contar con la sociedad civil y las empresas no podemos avanzar, pero el poder público tiene también mucho que hacer y que decir, a través de una regulación que debe ser siempre razonable y proporcionada”.

En esta línea se expresa también Ana Palencia, directora de Comunicación Corporativa y Sostenibilidad de Unilever, que destacó el ODS 17 como pieza fundamental para avanzar en el equilibrio hídrico. La experta hace hincapié en la importancia de las alianzas estratégicas para reducir el gasto hídrico y el desperdicio alimentario, y la importancia de “compartir y no competir” en materia de sostenibilidad.

Palencia ha explicado la estrategia de la multinacional de alimentación para la reducción de la huella hídrica y el fomento de dieta más sostenible a nivel global señalando que, a través de ella, se ha logrado una reducción del 30% en el consumo de agua por parte de los proveedores agroalimentarios de la compañía y del 50% en los procesos de producción. “El reto que queda pendiente es continuar concienciando al consumidor para que conozca el impacto de sus acciones cotidianas”, ha apuntado.

LA CONCIENCIACIÓN EN LA RESTAURACIÓN

Joan Roca, chef del restaurante Celler de Can Roca, ha resaltado la importancia de la concienciación, que debe ejercerse desde todas vías disponibles. “La notoriedad genera una gran responsabilidad: cocinando podemos concienciar al público para ahorrar agua y reducir el desperdicio alimentario”, ha explicado. Roca recuerda que “desperdiciamos el 30% de los alimentos que producimos y no nos lo podemos permitir”.

En esta misma línea, Estanislao Arana ha recordado la importancia de la concienciación y de la educación ambiental, “que debe incorporarse desde la enseñanza primaria”.

De este modo, la concienciación es uno de los ingredientes básicos para la gestión futura del agua y de los alimentos, que juegan un papel fundamental en nuestro futuro hídrico.

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