Si hace unos días las declaraciones de Alexandre Bompard contra fabricantes y multinacionales —señalados como 'causantes' de la inflación— encendían la polémica, hoy el presidente del Grupo Carrefour ha querido ofrecer su cara más amable hacia los proveedores de la enseña.
En la mañana del 6 de septiembre ha anunciado a través de su perfil de Linkedin un acuerdo con siete de los proveedores de origen vegetal de la enseña "a fin de democratizar y desarrollar las alternativas vegetales disponibles para sus clientes".
Estos proveedores son Danone, Savencia, Andros, Bel, Bonduelle, Unilever y Nutrition & Santè. Sorprende particularmente la presencia de Unilever, una de las marcas acusadas junto a Pepsico y Nestlé de "no cooperar" en la lucha contra la inflación por el gerente de Carrefour y el ministro de Finanzas francés, Bruno Le Maire.
"En la actualidad, la alimentación representa cerca de un cuarto de nuestras emisiones. Además, uno de cada dos hogares sigue una dieta 'flexitariana, el calentamiento global se acelera y el poder adquisitivo de los franceses se encuentra bajo presión. Las alternativas de origen vegetal son una respuesta a muchos de estos problemas de nuestros clientes", ha declarado.
Según ha explicado, el objetivo de Carrefour es alcanzar los 3.000 millones de euros de facturación vegetal en 2026. "Estas alternativas de origen vegetal son buenas para la salud, buenas para el planeta y buenas para el bolsillo de nuestros clientes", ha reivindicado.
