En los últimos años, el panorama de los supermercados en España ha vivido transformaciones profundas: pandemia, cambios en hábitos de consumo, presión inflacionista y aceleración en la transformación digital han modelado un nuevo perfil de compra.
► Auge de la venta online (aunque con retraso)
Aunque el comercio electrónico en la alimentación ha crecido en 2024 (+6,3%), su peso sigue siendo modesto: apenas representa un 2,7% del total de las ventas en supermercados. Esto sitúa a España muy por detrás de mercados europeos más maduros: en Reino Unido esta cuota supera el 11% y en Francia ronda el 10%.
Esta situación, en buena parte, es debida a la mayor densidad comercial –en España tenemos un amplio parque de supermercados que hace que el consumidor tenga una tienda relativamente cerca de su hogar– y, fundamental, por el peso de los productos frescos en la cesta de la compra, que varía entre el 40% y el 50% en función de cada operador. Como dice un buen amigo mío: yo quiero ver el ojo del besugo cuando voy a comprar.
► Productividad, productividad, productividad…
Cómo mejorar la productividad para ser más eficientes y poder competir en un mercado tan exigente como el español se ha convertido en una auténtica obsesión para las compañías de supermercados.
El uso de herramientas de inteligencia artificial (IA) y analítica para gestión de inventario, predicción de demanda y optimización del reaprovisionamiento empiezan a ganar peso. Estas tecnologías permiten reducir desperdicios, ajustar stocks en tiempo real y anticiparse a cambios en la demanda. La automatización y optimización de procesos reducen errores, desperdicios y tiempos, lo que permite ahorro de costes y márgenes más competitivos.
Cómo mejorar la productividad para ser más eficientes y poder competir en un mercado tan exigente como el español se ha convertido en una auténtica obsesión para las compañías de supermercados
Esta optimización de procesos no solo se consigue con la inversión en tecnología, hay soluciones de merchandising que permiten ahorros de hasta el 50% en las tareas rutinarias de frenteo y reposición de productos en los lineales y que, además, mejoran la ergonomía de las personas que trabajan en tienda, liberando tiempo que pueden dedicar a lo realmente importante: el cliente.
► Concentración del mercado
El mercado español, con una cuota de apenas el 50% en su Top 5, es el de menor concentración de los grandes países europeos; muy lejos del 85% de nuestros vecinos franceses o el 74% de los supermercados ingleses.
El caso del líder Mercadona es único en Europa, con una cuota superior a la de sus cuatro inmediatos perseguidores. Solo Tesco, con una cuota del 28,2% en Reino Unido, tiene una cuota de mercado mayor que Mercadona.
Esta menor concentración, en gran medida, es debida al peso de las cadenas regionales, con una cuota conjunta del 18% y con un modelo de oferta muy similar entre ellas: apuesta por los productos frescos y variedad de marcas de fabricante.
Estas compañías regionales cada vez son menos regionales y expanden su área de influencia más allá de su región de origen. Además, estas compañías han sido un actor importante en la concentración del sector, adquiriendo otras compañías locales o tiendas procedentes de desinversión de grandes grupos.
Desde la compra de Supersol por Carrefour en el año 2021 no se ha producido ninguna operación de compra de una compañía regional por uno de los grandes grupos. Veremos si en 2026 se produce un movimiento corporativo en este sentido…
Alfonso Sebastián
(*) Artículo incluido en el Anuario Perspectivas FMCG 2026 de FRS, que incluye el Especial Marcas de Distribución (con el Top 300 de Productores) y el Especial Franquicias y Cooperativas de supermercados 2026. Una obra exclusiva que ha sido posible gracias al patrocinio de Campofrío, Nestlé, HL Display y Winche, con el apoyo de otras empresas anunciantes.