Cruzcampo, Cabreiroá y Bimbo también pierden el Mundial
Ser patrocinador de La Roja sale a entre 500.000 y 3,5 millones de euros, según el grado de protagonismo que tenga la marca.
El desastre inesperado que ha supuesto la participación de La Roja en el Mundial de Fútbol no ha sido sólo deportivo. En términos económicos, las marcas que apostaron por el equipo español, bien como patrocinadores oficiales, bien como colaboradores, también han padecido los estragos de esta debacle.
Entre ellas, se encuentra Cruzcampo (patrocinador oficial principal, al igual que Movistar e Iberdrola) o Gillette, Cabreiroá y Bimbo, por citar sólo algunas enseñas. Y es que ser patrocinador de La Roja sale a entre 500.000 y 3,5 millones de euros, según el grado de protagonismo que tenga la marca.
Se han esfumado así los hipotéticos 986 millones de euros que estimó Kelisto que podría haber inyectado una victoria española en la economía del país, informa PuroMarketing. Otras víctimas destacadas han sido el grupo de comunicación Mediaset, Nissan, Pelayo o Adidas.
Por su parte, la publicidad durante el Mundial ha quedado también muy tocada. Seguramente habrá habido numerosas cancelaciones de emisión de campañas y los anuncios ya emitidos no habrán logrado el impacto tan positivo que hubiesen querido. Para hacerse una idea, en 2010 los anuncios del Mundial en televisión costaron entre 150.000 y 250.000 euros.
Novedades destacadas