Embutidos curados: descubre sus beneficios para la salud

Cuidar de la salud se ha convertido en una de las prioridades de la población en la actualidad. Seguir una alimentación más saludable, hacer deporte de manera habitual y reducir el consumo de alcohol o de tabaco son los principales consejos de la comunidad médica a los ciudadanos.

Es especialmente en la alimentación donde se presta especial atención para evitar ingerir alimentos perjudiciales para la salud (alimentos grasos, con demasiada azúcar…). Pero en esta batalla por mejorar nuestra alimentación no podemos sacrificar los embutidos curados. Suelen ser vistos como alimentos muy calóricos o con excesivas grasas, pero lo cierto es que su consumo se recomienda de forma moderada en todo tipo de dietas gracias a sus interesantes propiedades.

Beneficios para la salud de los embutidos curados

Consumir embutidos curados de calidad como El Pozo Jamon Legado Ibérico aporta a nuestro organismo nutrientes tan interesantes como los siguientes:

Alto contenido en proteínas

Los embutidos curados están elaborados con distintas carnes de cerdo que conservan un elevado contenido en proteínas. Estas proteínas son de gran calidad y ayudan al organismo a incrementar su capacidad de respuesta y su fortaleza física. Las proteínas son esenciales en una dieta equilibrada y los embutidos curados aportan buena parte de la cantidad recomendada con un consumo moderado.

Son ricos en minerales

Los embutidos curados son ricos en minerales como el fósforo. Este mineral ayuda al mantenimiento de dientes y huesos, a fortalecer las defensas del organismo y a conseguir un aumento y conservación de la masa muscular de todo el cuerpo. El consumo de embutidos curados puede formar parte incluso de dietas para deportistas y se recomienda para niños en etapas de crecimiento y desarrollo para fortalecer sus huesos y dientes.

Vitaminas del grupo B

Los embutidos curados cuentan con una cantidad importante de vitaminas del grupo B. Entre ellas cabe destacar la vitamina B1 o tiamina, esencial para el buen funcionamiento del corazón; la vitamina B3 o niacina, fundamental para disminuir la fatiga y el cansancio; o la vitamina B12, que fortalece el sistema inmune y que potencia la formación de glóbulos rojos en la sangre. Este aporte de vitaminas del grupo B es esencial para disfrutar de una buena salud.

Grasas insaturadas

Suele desconocerse que las grasas que están presentes en los embutidos curados son buenas para el corazón. Esto es así porque, en su mayoría, son grasas insaturadas, también conocidas como las “grasas buenas” porque ayudan a cuidar del corazón y del sistema cardiovascular. Y es que, aunque los embutidos curados también tienen grasas saturadas, su contenido es similar o inferior a otros productos de consumo habitual como la mantequilla, el huevo o pescados como la caballa o los calamares.

Así que, como se puede apreciar, los embutidos curados pueden formar parte de una dieta saludable con un consumo moderado gracias a su aporte de vitaminas, proteínas, minerales y grasas insaturadas que ayudan a nuestro organismo a disfrutar de valores nutricionales adecuados que mejoren nuestra salud.