Los gigantes de la alimentación ven crecer sus ventas pese a la subida de precios
Coca-Cola, McDonald's y Unilever son ejemplos de multinacionales que han recogido esta bonanza en sus cifras en el segundo trimestre del año debido a la conocida por los expertos como 'demanda inelástica': la demanda de ciertos productos aumenta, a pesar de que los precios continúen al alza.
A pesar de la elevada inflación que tiene en jaque a buena parte de las economías mundiales, gigantes de la alimentación como Coca-Cola, McDonald's y Unilever han elevado sus ventas en el segundo trimestre del año, como demuestran los resultados financieros de estas grandes multinacionales.
Los economistas conocen este fenómeno como 'demanda inelástica', es decir, la demanda de ciertos productos aumenta, pese a que los precios continúen al alza, recoge france24.com. Este concepto suele venir asociado a productos de primera necesidad como alimentos o artículos de aseo.
En concreto, Unilever, dueña de marcas como Knorr, Dove o Hellmann's, incrementó sus ventas el 8,8% en el segundo trimestre, a pesar de haber subido sus precios de media el 11,2%, según Reuters.
Por su parte, Coca-Cola informó de un crecimiento del 8% y del 12% en sus precios globales. El presidente ejecutivo de esta compañía, James Quincey, afirmó que la multinacional aumentará aún más los precios en los mercados donde los costes están subiendo y que trasladará la mayoría de ellos a los consumidores ante una posible recesión.
Asimismo, en el trimestre terminado en junio, McDonald's obtuvo unas ventas globales el 10% superiores. Su CEO reconoció que está considerando agregar más opciones de menú con descuento porque la inflación está llevando a algunos consumidores a comprar productos más baratos.
CRECE LA COMPRA DE ALIMENTOS
A medida que los inversionistas observan de cerca los resultados corporativos en busca de señales de que las economías se están encaminando hacia la recesión, los consumidores envían señales contradictorias, asegura el citado medio.
Walmart aseguraba recientemente que sus clientes estadounidenses están comprando alimentos y otros artículos de primera necesidad, pero, en cambio, se saltan los pasillos llenos de ropa y otros elementos no esenciales. Por ello, ha anunciado que bajará los precios de la ropa y la mercancía general de manera más agresiva para disminuir la acumulación de inventario.
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