UNO, la Organización Empresarial de Logística y Transporte, ha solicitado a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, dar prioridad a una política de movilidad que tenga en la distribución urbana de mercancías su pilar fundamental. El director gerente de esta entidad, Daniel Latorre, ha propuesto, en el marco de la reunión del Pacto por la Movilidad, la inclusión del Decálogo para la Distribución Urbana de Mercancías y el E-commerce en el próximo Plan de Movilidad Urbana 2019-2024, que en estos momentos última el Ayuntamiento.

“El sector logístico mantiene el objetivo común con el Ayuntamiento de descongestionar la ciudad, reducir el volumen de emisiones y garantizar la seguridad y el servicio de reparto, tanto a los ciudadanos en sus domicilios como a los comercios y al canal Horeca", explica el director gerente de UNO.

La patronal logística agradece que algunas de las medidas sugeridas ya han sido implementadas por el Ayuntamiento de Barcelona, pero insiste en que la adopción aislada de las mismas "resta eficacia" a la gestión de la movilidad urbana.

FLOTA SOSTENIBLE

"En ciudades como Barcelona, con 1,7 millones de habitantes (3 millones teniendo en cuenta la población de los municipios más próximos a la capital) es imprescindible priorizar una política que siente las bases de un reparto sostenible y eficiente", señala UNO.

En este sentido, las empresas de logística y transporte están concienciadas de la necesidad de contar con una flota sostenible, pero para poder materializar sus inversiones y renovar sus vehículos "es necesario continuar avanzando en el actual plan para el establecimiento de puntos de suministro para los vehículos ecológicos", recuerda la patronal, que reclama "ayudas específicas" para la renovación de flota y en instrumentos de financiación para las mismas.

El Decálogo de la patronal destaca la necesidad de flexibilizar las restricciones en los horarios de entregas en el centro de la ciudad y en las zonas de carga y descarga. “Barcelona es pionera en la puesta en marcha de una App que permite a los repartidores reservar su plaza. Es imprescindible optimizar su operativa y un análisis exhaustivo de los datos generados por la App, para que las políticas estén en línea con la realidad de la ciudad”, asegura Daniel Latorre.

UNO incluye también en su Decálogo un llamamiento a regular las denominadas plataformas de economía colaborativa, para que todas las empresas que a día de hoy operan en el envío y entrega de paquetes o mercancías cumplan idénticas obligaciones y compitan en igualdad de condiciones. “Esta medida reduciría la creciente competencia desleal que sufre el sector, disminuiría el intrusismo y, lo más importante, aumentaría la seguridad y las garantías para el consumidor final”, ha asegurado Latorre.

EL DECÁLOGO DE UNO

En concreto, las 10 medidas que recoge el Decálogo de UNO son:

1.- Desarrollar normativas y ordenanzas supramunicipales de carácter armonizado.

2.- Crear un plan coordinado para el establecimiento de puntos de suministro de combustibles menos contaminantes.

3.- Flexibilización de restricciones en los horarios de entrega.

4.- Mejora de las infraestructuras y usos de las zonas de carga y descarga.

5.- Identificación de los vehículos que realizan la distribución urbana a través de un registro oficial.

6.- Regulación de las plataformas de economía digital dedicadas al transporte (economía colaborativa y digital).

7.- Mejorar la eficiencia del transporte, permitiendo circular vehículos de hasta 18.000 kilos de masa máxima en la ciudad, para así reducir el número de vehículos y viajes.

8.- Facilitar y regular la distribución urbana de mercancías en horario no convencional.

9.- Desarrollar un calendario de restricciones realista para las empresas.

10.- Ayudas específicas para la renovación de flota.