Retailers | Plusfresc se lo pone más fácil a los coches eléctricos

Instala puntos de recarga para estos vehículos en tres de sus supermercados ubicados en Tarragona, Lérida y Mollerussa.

Entrada de un supermercado Plusfresc
Entrada de un supermercado Plusfresc

Plusfresc ya cuenta con tres puntos de recarga de coches eléctricos. En concreto, se encuentran en Lleida, en la tienda situada en la Avenida Barcelona 65-69, Tarragona (Av. Roma 11) y en Mollerussa (C/ Ferrer i Busquets, 9).

La cadena ofrece este servicio en los aparcamientos de sus establecimientos de forma gratuita y como un "servicio más" para sus clientes, señala. Al consumidor que lo solicite se le proporciona una tarjeta especial que activa el cargador.

Al cliente que solicite este servicio, que es gratuito, se le proporciona una tarjeta especial que activa el cargador

"Desde Plurfesc creemos que facilitar la movilidad eléctrica aumentando los puntos de recarga de los vehículos eléctricos disponibles contribuirá a la progresiva substitución de los vehículos que utilizan combustible. Este cambio es importante para la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y del calentamiento global que afecta a todo el planeta con consecuencias muy graves", explica Rafel Oncins, responsable de RSE en la enseña.

El servicio de recarga de coches eléctricos se añade a las diversas iniciativas que la cadena ha impulsado en los últimos años para conseguir un entorno más sostenible, como la instalación de islas para reciclar el aceite de cocina, bombillas de bajo consumo o pilas.

INVERSIÓN DE 2,5 MILLONES

En los dos últimos años, la enseña ha invertido un total de 2.500.000 euros en la renovación de sus tiendas con el objetivo de que sean más sostenibles. Estas actualizaciones incluyen la renovación de sistemas de iluminación con tecnología led, sistema de renovación de gases, cambios de murales frigoríficos con puertas de vidrio y la instalación de centrales de frío con certificado AA en un total de 56 tiendas.

A través de estas medidas, la compañía prevé reducir hasta un 50% en el consumo y potencia energética anuales para la iluminación, traduciéndose en un ahorro de 1.747.000 kW al año y una reducción de 611.450 kg de CO2 en emisiones de gases.

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