Tras casi ocho años de propiedad, el fondo norteamericano L. Catterton, perteneciente al conglomerado de lujo LVMH y propietario de Louis Vuitton, cederá el control de Goiko al fondo francés Capza, que financió originalmente la compra.
La operación, todavía pendiente de cerrarse, se produce en un contexto en el que la venta de la compañía no ha prosperado pese a haberse entablado conversaciones con un interesado, y la refinanciación de parte de la deuda tampoco ha podido cerrarse, informa El Confidencial.
Pese a que su facturación se ha cuadruplicado desde que los estadounidenses entraron en el capital, las cifras han quedado lejos de los objetivos del fondo, en un contexto en que la situación macroeconómica en la que los hogares están limitando el consumo y existe una competencia feroz en el sector.
Según recuerda el citado medio, L.Catterton entró en el capital de Goiko Grill en 2018, adquiriendo el 80% de la cadena, mientras que Andoni Goicoechea mantenía el 20% restante. La operación contó con el respaldo de 39 millones de euros de Capza a través de financiación mezzanine.
Fuentes del sector explican que L.Catterton no ha logrado devolver la financiación que Capza aportó en 2018, y desde entonces ha estado refinanciando la deuda de forma constante. Por ello, busca poner fin a esta situación entregando la compañía al fondo francés.
FACTURACIÓN Y DEUDA
Goiko Grill elevó su facturación hasta los 138,6 millones de euros en 2023, según sus últimas cuentas públicas, impulsada por el incremento en las hamburguesas vendidas y por el delivery y la subida de precios derivada de la inflación. No obstante, su resultado siempre ha sido negativo desde que llegó Catterton.
Sin embargo, al cierre de 2023, la deuda superaba ligeramente los 100 millones de euros, la mayor parte correspondía a compromisos a largo plazo, aunque 29 millones debían abonarse en menos de un año. La empresa consiguió una refinanciación de 39 millones de euros firmada con Capza.
En todo caso, esta situación financiera no ha impedido el fortalecimiento de la marca Goiko en los últimos años. Aunque no logró debutar en Italia, desde 2018 la compañía ha pasado de 44 establecimientos a cerca de 130, incluyendo su expansión en Portugal. Además, este año logró desbloquear el laberinto administrativo que desde 2023 impedía la apertura de su flagship de 700 m2 en la Puerta del Sol, en Madrid.