La pérdida desconocida (hurtos, errores administrativos y fraude de proveedores) supuso el pasado año pérdidas de 2.817 millones de euros a los comercios españoles, lo que supone el 1,1% del total de su facturación, según datos del Barómetro del Hurto en la Distribución Comercial elaborado por NIQ a lo largo de 2025, con la colaboración de Checkpoint Systems y la Asociación de Empresas del Gran Consumo Aecoc.
Este análisis indica que el 77% de la pérdida desconocida está directamente relacionada con los hurtos (los hurtos externos suponen el 59% del total, mientras que el 18% corresponden al hurto interno). Los errores administrativos representan el 15% y el 9% restante lo ocasiona el fraude de proveedores.
Los hurtos de productos son una conducta delictiva a la que se enfrentan a diario desde pequeños comercios hasta grandes superficies de distribución. Las pérdidas económicas que generan a las compañías son enormes y, según reconoce una de cada tres de las empresas encuestadas, los hurtos externos se han incrementado en el último año.
Los comerciantes tienen claro en qué zonas de los establecimientos se localizan este tipo de prácticas: el 78% de los comercios señala la propia sala de venta como la principal ubicación en la que los delincuentes perpetran sus hurtos. El segundo "punto caliente", son los probadores: un 9% de los comercios aseguran que aquí es donde más hurtos se llevan a cabo, por encima incluso de las cajas de salida, que, a pesar de ser una zona crítica, solo es el lugar principal de riesgo para el 4% de los participantes en el estudio.
EL ACEITE, UNO DE LOS PRODUCTOS MÁS HURTADOS
Pero ¿qué es lo que más se hurta? La cantidad media hurtada por acto se sitúa en 195,58€, si bien el 83% de los hurtos no supera los 150€. El estudio también revela cuáles son los artículos más cotizados por los ladrones por categorías.
Así, el hurto de aceites ha crecido meteóricamente en los últimos años, fruto del incremento de precio y, este año, se ha consolidado como el producto más hurtado. Domina por tanto la categoría de alimentación y bebidas, en la que también destacan conservas /ahumados, los embutidos y los quesos. La quinta posición la ocupan los vinos y licores, que tradicionalmente son los productos más hurtados, pero que este año ha perdido su condición debido al crecimiento de la problemática en los otros artículos.
En la categoría de cuidado personal y belleza resaltan las colonias y fragancias como el “producto estrella”. Un escalón por debajo se encuentran las protecciones solares y las cuchillas de afeitar. El maquillaje desciende al cuarto puesto del ranking.
Otro detalle que destaca el informe es la entrada con fuerza del hurto de productos para mascotas, en especial de accesorios, que ha tenido un auge en el último año debido al imparable crecimiento del número de mascotas que hay por hogar en España.
Productos más hurtados en el comercio español.
LADRONES MULTIRREINCIDENTES
El Barómetro confirma, además, que la mitad de los hurtos (el 51%) son realizados por autores multirreincidentes; es decir, que realizan tres hurtos o más al año en los establecimientos y que casi la mitad de ellos (48%) tienen menos de 30 años.
Otro factor clave es que la agresividad en los hurtos se ha disparado en los últimos años. Concretamente, el 74% de los encuestados declara que la agresividad verbal o física de los infractores hacia el personal de tienda se ha incrementado mucho y además un 65% advierte que cada vez es más difícil encontrar personal de seguridad, en gran medida, por esta escalada de la agresividad.
Asimismo, el 35% de los hurtos son acometidos por bandas organizadas que operan con fines lucrativos y suponen un gran problema para la seguridad de los establecimientos. Según los especialistas en hurtos de Checkpoint Systems, estos criminales detectan las oportunidades de hacer negocio y hurtan diferentes productos de alto valor para posteriormente revenderlos en mercados paralelos.
La totalidad de los expertos encuestados dispone de cámaras de vigilancia en sus tiendas. El 96% de los establecimientos tiene antenas antihurto y el 83% está protegido por vigilantes de seguridad físicos en la tienda. Además, un 74% de los comercios cuenta con arañas (alarmas rígidas), collarines y cajas de policarbonato para asegurar individualmente los productos; y cerca de la mitad (un 48%) aprovecha la tecnología RFID con una función antihurto.
Según el estudio, las soluciones para expositores y mecanismos de acción retardada están presentes en el 35% de los establecimientos y las herramientas de análisis de datos recopilados por las antenas antihurto en el 43%. También destaca que un 48% de los comercios ya implanta medidas específicas para luchar contra el crimen organizado en sus establecimientos.