Vicky Foods sienta los cimientos de su expansión europea. El grupo valenciano de alimentación, propietario de marcas como Dulcesol o Be Plus, ha inaugurado este jueves su primera planta productiva en Francia, una instalación estratégica con la que busca reforzar su crecimiento en el continente y ganar competitividad en mercados clave como Alemania, Suiza, Italia o el Benelux.
El complejo está ubicado en Fragnes-La Loyère, municipio bien comunicado y que Dominique Juillot, presidente de Gran Chalon, definió como un ejemplo de la "voluntad de reindustrializar Gran Chalon". El evento ha contado también con la presencia del ministro de Industria francés, Sébastien Martin.
La compañía ha desembolsado más de 100 millones de euros en el desarrollo de esta planta de 23.578 metros cuadrados, equipada con líneas de producción de tecnología 4.0 y diseñada para operar con altos estándares de eficiencia energética. Un 30% de la superficie industrial está cubierta por placas fotovoltaicas destinadas al autoconsumo, en línea con la estrategia de sostenibilidad del grupo.
La fábrica cuenta ya con una primera línea en funcionamiento dedicada al pan de hamburguesa, mientras que una segunda línea, aún en fase de pruebas, producirá pan de molde. La hoja de ruta prevé una tercera línea —en 2027— que ampliará la capacidad con la fabricación de productos de pastelería.
En materia laboral, Vicky Foods ha incorporado ya a cerca de 100 empleados, y prevé sumar entre 100 y 120 profesionales adicionales en los próximos 12 a 18 meses. La tercera línea productiva elevará los empleos directos a unos 300. El plan a largo plazo contempla una segunda fase de expansión con dos naves adicionales que podrían llevar la plantilla del complejo hasta los 1.000 trabajadores.
Rafael Juan, CEO de Vicky Foods, destacó durante la inauguración que la planta simboliza "una nueva etapa para seguir innovando y generando oportunidades, siempre con la sostenibilidad, la humildad y las personas en el centro de nuestra estrategia". Para el grupo, Francia ha sido históricamente un mercado prioritario: supone ya el 7,5% del negocio global y el 34% de las ventas internacionales.
La entrada en funcionamiento del complejo industrial coincide con un buen momento para la compañía. Vicky Foods cerró 2024 con una facturación de 707 millones de euros, un 12% más que el ejercicio anterior. El grupo comercializó 237.472 toneladas de producto, lo que supone un aumento del 11% y un avance significativo de su actividad exportadora, presente en 50 países.