Enrique Tomás prevé cerrar el año con una facturación de 84 millones de euros y un Ebitda de más de 7 millones de euros, lo que supondría el mejor ejercicio desde su fundación en 1990.

Las cifras vendrían de la mano del cumplimiento de su Plan Estratégico, en el que se contempla continuar su expansión tanto en España como en algunos de los principales países del mundo. “El volumen de jamones que pasan por nuestras manos asciende a 1.700 unidades al día. Las previsiones son que 2023-2024 estaremos por encima de los 3.000”, explica Enrique Tomás, fundador de la compañía.

Apuesta por la innovación y la sostenibilidad

Enrique Tomás tiene previsto invertir 3 millones de euros en su sede central, inaugurada en el año 2020 en Montigalá (Badalona), que se destinarán a optimizar la producción y a crear productos innovadores. Además, se iniciará el Plan de Sostenibilidad previsto por el que se contempla la instalación de placas solares y puntos de carga de vehículos.

Nuevos espacios gastronómicos

Próximamente, la compañía comenzará a operar espacios gastronómicos en hoteles gracias a la creación de una nueva gama de productos diseñada específicamente para los servicios Food&Beverage (F&B) en hoteles y establecimientos turísticos.

Con esta nueva propuesta, Enrique Tomás quiere aportar soluciones distintivas que aumenten el valor del F&B en los hoteles de manera sostenible. Para ello, la marca aterriza en los hoteles para operar con sus cinco conceptos gastronómicos. El primero de ellos es Enrique Tomás Experience, un concepto de Fine Dine en el que el jamón ibérico es el máximo protagonista. Otro de los conceptos es La Barra Enrique Tomás, que es el modelo que está presente en los aeropuertos de Barcelona y Madrid. Foddies, el “colmado del siglo XXI”, es, por su parte, un concepto también presente ya en varios aeropuertos nacionales y basado en la conserva española, vinos, quesos, chacinas ibéricas y una selección de propuestas gastronómicas elaboradas por chefs como Albert Adrià, Javier de Las Muelas, Nando Jubany, Escriba o Carlos Abellán.

Los dos últimos conceptos son La Jamonería y Express&Co, el último modelo de negocio que Enrique Tomás ha puesto en marcha, especializado en el mundo del café, y con una oferta gastronómica de healthy.

Además de estos cinco conceptos, la marca también ha desarrollado Gamma Ibérica, una línea gastronómica que favorece la aportación de valor en los servicios food and beverage de la habitación, y mejora el rendimiento en los restaurantes y la satisfacción de los clientes en los buffets de desayunos.

“La excelencia de nuestros productos y el alto reconocimiento de nuestros conceptos gastronómicos, junto con la capacidad logística y la experiencia operacional que poseemos, nos hacen ser la opción perfecta para conseguir que los hoteles doten de innovación a sus conceptos gastronómicos, mejoren las calidades ofrecidas a sus clientes y puedan aumentar las rentabilidades de sus operaciones”.

Apuesta por la internacionalización

Otro de los pilares estratégicos de la cadena de jamones gourmet, es su apuesta por la internacionalización. De ahí que la compañía haya invertido 6 millones de euros en tiendas nuevas y reformas de alguna de las existentes.

En 2014, Enrique Tomás dio el salto al mercado internacional con la inauguración de su primera tienda en el Soho, en Londres. A este espacio se sumaron otros en Italia, Francia y Andorra. El salto a Latinoamérica se dio con la apertura de una primera tienda en México, a los que seguirían otras en Argentina, Perú y, novedad de este año, República Dominicana y Puerto Rico. A mediados del próximo mes de noviembre está prevista la apertura de un Enrique Tomas Experience en Miami (Florida), que se suma al que la Compañía tiene en San Antonio y Dallas (Texas). Además, en 2023, la empresa al aterrizará en Japón para ponerle nombre al jamón ibérico, también, en Asia.

En España se han llevado a cabo destacadas aperturas en los aeropuertos de Fuerteventura, Málaga, Mallorca, Vigo e Ibiza, se ha inaugurado una segunda tienda en Bilbao y dos nuevas en Sevilla, además de otras tres en la estación de tren de Atocha (Madrid) y otra en Segovia. Se prevé que, en 2023, se abran tiendas delicatessen en Mallorca, Valencia, Tenerife, Las Palmas de Gran Canaria y Sevilla, donde además se inaugurará un foodmarket de 1200 m2.