Daniel Kretinsky, dueño de Metro y accionista de Caprabo, ha desvelado sus planes para la segunda reestructuración de Groupe Casino, a la que se ha visto obligado debido al fuerte endeudamiento del grupo.
El multimillonario checo, que desde marzo de 2024 controla el 53,7% de Casino a través de France Retail Holdings (FRH), estaría dispuesto a inyectar 300 millones a cambio de elevar su participación al 68% y reducir la deuda en 600 millones. Los otros 300 millones serían aportados por los acreedores de la enseña, que renunciarían al cobro, lo canjearían por acciones o una combinación de ambas.
En la actualidad, la deuda neta garantizada de Groupe Casino se sitúa en 1.400 millones, por lo que la reestructuración permitiría una reducción hasta los 800 millones. Como parte del mismo plan, Kretinsky aspira a reducir el tipo de interés que paga por su deuda, del 9% actual al 6%. En el primer semestre del año, Casino informó de un ratio de apalancamiento de 9,75 veces el ebitda, muy por encima de la media de 3 del sector en Francia. El objetivo ahora es reducir el ratio al 1,7 para 2029.
De llevarse a cabo, este plan permitiría liberar un paquete de 1.700 millones de euros con destino a inversiones dentro del plan Renoveau 2030, el 33% de los cuales —566 millones— irá destinado a abrir o renovar establecimientos.
Los objetivos comerciales del plan comprenden la modernización total del parque de Monoprix, con el desarrollo del formato mercaurante (La Cantine) en 50 tiendas y de la Beauté en 90; el despliegue de Oxygène en 900 tiendas en Franprix (el 85% del parque), así como la apertura de 200 establecimientos; y la ampliación de la Ferme en 150 tiendas en Naturalia (70% del parque), junto con la apertura de 20 tiendas.
En proximidad, la directiva espera estrenar nuevos conceptos Spar y Casino en 300 establecimientos y abrir 210 más, además de impulsar el concepto de restauración Coeur de Blé en 70 tiendas.
En conjunto, el grupo espera modernizar su parque de 4.666 tiendas (Monoprix, Franprix, Naturalia, Casino, Spar y Vival) y abrir 430 más en los próximos cinco años. Esto le permitiría alcanzar los 15.800 millones de euros de facturación bruta en 2030 (+0,8% anual en ventas netas), con un ebitda ajustado de 644 millones y un cash flow libre de 286 millones.
El paquete de medidas supone un espaldarazo a la gestión de Philippe Palazzi, CEO de Casino, que ya ha iniciado algunas reformas como la renovación de La Cantine o la nueva imagen de su enseña homónima, pero la pelota está ahora en el tejado de los acreedores del grupo. Si todo marcha según los planes de Kretinsky, debería alcanzarse un acuerdo antes de finalizar el segundo trimestre de 2026.