La familia Haniel, accionista fundador de Metro, ha vendido sus acciones del gigante mayorista, al igual que ha hecho el minorista de electrónica Ceconomy, al inversor checo Daniel Kretinsky, informa el medio de comunicación alemán LZ.
A este respecto, cabe recordar que, el pasado mes de febrero, Kretinsky, principal accionista de este grupo alemán, estrechó su control sobre la compañía con intención de sacarla de la Bolsa, y ofreció al resto de accionistas 5,33 euros por acción, lo que le facilitaría controlar el 75% de las acciones.
La dirección de Metro apoyó la oferta, afirmando que operar sin cotizar en Bolsa permitiría a la empresa funcionar en condiciones más tranquilas. Este no fue el primer intento de Kretinsky de hacerse con el control total de la empresa mayorista. Ya hubo una OPA similar en 2019 que no tuvo éxito.
El multimillonario checo entró en Metro en 2018. El vehículo de inversión de Kretinsky, EPGC, ha controlado hasta ahora el 49,99% de las acciones de Metro, y sus representantes también forman parte del Consejo de Supervisión. El inversor ya había acordado sus planes con los dos principales accionistas del grupo y socios fundadores, Meridian y Beisheim. No ofrecerán sus acciones a Kretinsky, pero permanecerán en el consejo, según recoge MarketScreener.
En el primer trimestre de su año fiscal, Metro alcanzó unas ventas de 8.600 millones de euros, el 5,6% más, y el ebitda se elevó hasta los 412 millones. La cadena, con 623 tiendas en más de treinta países y 85.000 empleados, aspira lograr un crecimiento orgánico de los ingresos de entre el 3% y el 7% este año. Metro tiene 623 tiendas en más de treinta países y emplea a 85.000 personas.