Ocado ha decidido mover ficha para recuperar la iniciativa comercial después del golpe que supuso el pasado noviembre la marcha atrás de Kroger, su principal socio internacional. El grupo británico de tecnología y logística para la distribución alimentaria ha suprimido en la mayoría de los mercados las cláusulas de exclusividad que ligaban a los retailers a su tecnología de preparación y expedición de pedidos online, una medida con la que busca volver a resultar atractivo para nuevas cadenas de supermercados, según ha informado Reuters.
Hasta ahora, Ocado firmaba acuerdos exclusivos —normalmente por un periodo de 12 años— para la implantación de sus grandes almacenes robotizados, una fórmula que garantizaba ingresos a largo plazo, pero que ha terminado convirtiéndose en un freno en un contexto de desaceleración del ecommerce alimentario y creciente presión sobre la rentabilidad. La compañía ya había anticipado en julio, al presentar sus resultados semestrales, que la mayoría de estos acuerdos vencerían a finales de año.
El giro estratégico llega en un momento delicado para la tecnológica británica. Sus acciones acumulan una caída cercana al 22% en lo que va de año, reflejo de las dudas del mercado sobre su capacidad para captar nuevos clientes en un entorno en el que los supermercados priorizan soluciones más rápidas y baratas. En noviembre, Kroger —segundo mayor distribuidor de EE UU— anunció el cierre de tres de los ocho centros automatizados construidos junto a Ocado, al no cumplir con sus expectativas financieras.
El repliegue de Kroger subrayó una tendencia más amplia en el sector: el auge de modelos menos intensivos en capital, apoyados en la preparación de pedidos en tienda y en plataformas como Instacart o DoorDash. Rivales que, pese a llegar más tarde, han ganado terreno gracias a una estructura de costes más flexible.
Con el fin de las exclusividades, Ocado quiere volver a desplegar "toda su gama de soluciones robóticas y basadas en inteligencia artificial" en varios mercados internacionales, según ha explicado su consejero delegado, Tim Steiner, en declaraciones recogidas por Reuters. Además de Kroger, la compañía cuenta con acuerdos con otros doce socios internacionales: Alcampo y Bon Preu en España; Aeon en Japón; Lotte Shopping en Corea del Sur; y Coles en Australia, entre otros. En Reino Unido las condiciones contractuales no cambiarán.