Pastas Gallo reubicará a 18 trabajadores de la división de pasta seca de su histórica fábrica de Granollers (Barcelona).
Proa Capital, el fondo de inversión que dirige Fernando Ortiz y controla el grupo alimentario desde 2019, baraja concentrar la producción de pasta seca en las instalaciones de El Carpio (Córdoba), o bien cederla a proveedores externos, lo que supondría el cierre de esta división en Granollers y el traslado de 18 personas.
Cuatro de los trabajadores serán trasladados a la fábrica vecina de Esparraguera, también en Barcelona, mientras que los 14 restantes serán reubicados a otras divisiones dentro de la misma fábrica de Granollers, según han señalado fuentes de Pastas Gallo a FRS.
La intención de Néstor Nava, director general de Gallo, y de Proa Capital sería reducir costes y acelerar la optimización de procesos productivos ante los malos resultados de la compañía, que declaró pérdidas por valor de más de 200.000 euros en el último ejercicio. Las ventas, que cayeron un 2% hasta los 235 millones de euros, tampoco evolucionan adecuadamente, en parte por el avance de la marca de distribución en las categorías más fuertes de la empresa.
En esta tesitura, la directiva prevé que la fábrica de Granollers, donde hasta ahora se elaboraba pasta para canelones, lasañas y otros tipos de pasta plana, se dedique exclusivamente a la pasta fresca, que produce en volúmenes mucho menores y requiere de una plantilla más reducida.
La salida de Fernando Fernández a Promarca, presidente ejecutivo y consejero delegado de Gallo desde 2019, confirmada ayer, debería acelerar la reestructuración productiva del grupo.