El vino más caro del mundo… se hace en España

¿Sabes que el vino más caro del mundo se elabora en España? Pues así es. Se llama AurumRed Serie Oro y se produce en Cuenca, en la finca de Hilario García, Las Pedroñeras, que cuenta con cepas centenarias. Sin duda, una serie de características hacen “único” a este vino, indica la firma cuyas botellas se comercializan a 25.000 euros cada una. Veamos cuáles son.

“AurumRed no es un vino como los demás debido a que se diferencia del resto por incorporar inventos que en ningún otro existen”, señala la compañía vitivinícola. Así, por ejemplo, es el único vino en el mundo que, una vez descorchado, no se avinagra pasados los meses e incluso años.

Asimismo, los vinos blancos, y especialmente los tintos de la marca, son también los únicos en el mundo en los que girando la copa hacia la derecha se obtendrán unos aromas y sabores y haciéndolo a la izquierda, se obtendrán otros distintos.

Sin embargo, existen algunos “secretos”, casi de alta tecnología y de investigación propia, que hacen que este vino sea tan especial. Según la firma, más de cien aportaciones hacen que sea “un mundo propio en el vino”, entre ellas tratar el agua con ozono; inyectar energía piramidal; canalización de información a la planta por su raíz; encauzar los ciclos lunares; ionización aérea; o intercambio iónico.

300 BOTELLAS AL AÑO

En su pequeña bodega, Hilario García produce al año 300 de estas botellas, de las que comercializa 150 por temporada, y reserva el resto para los clientes que quieren repetir, señala el diario Ideal. Cada copa viene a salir por unos 4.000 euros más o menos, ahí es nada.

De la bodega salen también 6.000 botellas al año de la serie plata, a 2.200 euros la pieza, y 3.000 de sauvignon blanc, mucho más asequibles, a unos 30 euros. Pero el que destaca es, como decimos, el de la serie oro, resultado de tan particular alquimia.

Según explica Hilario García, el que hace todo en la bodega es él y si no le ha puesto un nombre a cada uva es porque no se le ha ocurrido. Él se encarga de proporcionar a las plantas un "cuidado especial no solo racimo a racimo, sino grano a grano".

La botella es otro punto relevante. Está patentada por García y fabricada en Italia entre grandes medidas de seguridad, para que nadie la copie. "Las botellas siempre se han almacenado tumbadas, pero como yo nunca acepto lo que existe, busqué otras maneras de colocarlas. Probé con muchas clases, pero no funcionaba ninguna, hasta que di, por casualidad, con un tipo de envase que beneficiaba bastante al vino si se ponía de pie", explica.

Hilario García confiesa que le gusta este vino pero que no lo bebe mucho. "Lo que se mete de forma natural en la botella es un montón de información para que sea el propio vino el que hable", asegura su creador.