La demanda de productos más naturales, sabrosos y con mejor información nutricional se convierte en el principal desafío para fabricantes y distribuidores en relación con su actual oferta plant-based. Así se desprende de las conclusiones de la quinta edición del informe The Green Revolution 2025, elaborado por la consultora de estrategia e innovación Lantern, que destaca a Carrefour como el retailer mejor valorado para encontrar productos plant-based, mientras que Aldi gana relevancia y las tiendas especializadas pierden peso.
El estudio, que desde 2017 analiza la penetración de dietas veggies y la transformación del sector alimentario hacia modelos más sostenibles y conscientes, confirma que el 11,1% de la población adulta española -unos 4,6 millones de personas- sigue algún tipo de dieta plant-based, una cifra prácticamente idéntica al 11,4% de 2023.
El movimiento veggie, que experimentó un fuerte auge tras la pandemia y una posterior corrección, entra así en una fase de estabilización. Dentro de este colectivo, 3,8 millones son flexitarianos (9,1%), 620.000 vegetarianos (1,5%) y 200.000 veganos (0,5%).
Pese a una ligera pérdida de seguidores -unas 50.000 personas menos que hace dos años-, casi tres de cada cuatro llevan más de cinco años manteniendo este patrón de alimentación, lo que demuestra que no se trata de una moda pasajera, según el estudio.
Mujeres y jóvenes, los grandes impulsores
El perfil veggie en España tiene un marcado componente femenino. El 14,6% de las mujeres adultas afirma seguir una dieta basada en vegetales, frente al 7,5% de los hombres, una brecha que se amplía respecto a 2023. Entre ellas, el flexitarianismo gana fuerza, con un crecimiento del 9,7% al 12,3% en dos años, mientras que en el público masculino se observa un retroceso continuado desde 2021.

En 2025 sigue aumentando el peso de las mujeres dentro de la tendencia.
La generación Z refuerza esta tendencia: el 15% de los jóvenes de 18 a 24 años se identifica como veggie, reflejo de un cambio de hábitos hacia consumos más sostenibles y conscientes. "Que uno de cada diez adultos en España siga hoy una dieta veggie nos habla de un mercado sólido y con un enorme potencial de innovación", señala Jaime Martin, CEO de Lantern, quien anima a las marcas a "escuchar a estos consumidores" y responder con productos "más saludables y auténticos" para conseguir así "una ventaja competitiva clara en los próximos años".

Las dietas vegetales calan con más fuerza entre la generación Z y entre 45-54 años.
Motivaciones y cambios de consumo
La salud sigue siendo la principal razón para adoptar una dieta vegetal, citada por el 62% de los flexitarianos, aunque desciende la preocupación por el bienestar animal (del 35% al 23%). Entre vegetarianos y veganos, el bienestar animal (67%) y la sostenibilidad (29%) continúan en cabeza, pero también con ligeros descensos respecto a ediciones anteriores.
Al mismo tiempo, casi la mitad de los encuestados (49%) ha reducido su consumo de productos plant-based industriales, priorizando alimentos frescos como legumbres, verduras y frutas, por considerarlos más saludables que muchas alternativas procesadas.
La insatisfacción con la oferta plant-based aumenta sobre todo en categorías como embutidos y quesos, y se señala la necesidad de mejorar la naturalidad, el sabor y la información nutricional de los productos.
Los datos de NielsenIQ respaldan esta evolución: las bebidas vegetales y las alternativas al yogur crecen con fuerza -mercados valorados en 400 millones de euros y 128 millones de euros, respectivamente-, mientras las alternativas a la carne retroceden hasta 118,4 millones de euros, con caídas del 2,13% en valor y del 1,38% en volumen respecto a 2023.
En conjunto, The Green Revolution 2025 dibuja un mercado estable pero cada vez más exigente, que obliga a la industria a innovar, elevar sus estándares de calidad y ofrecer transparencia si quiere acompañar a los 4,6 millones de españoles que ya han convertido la dieta vegetal en un auténtico estilo de vida.